2 de octubre de 2025
Winamax y el verdadero “comportamiento de riesgo”: cierres de cuentas, acusaciones e impagos
En los últimos meses hemos recibido en el despacho un número creciente de consultas de jugadores de Winamax. Los casos que se repiten tienen un patrón claro: cierres unilaterales de cuentas, acusaciones genéricas de fraude o colusión y, en muchos supuestos, impagos de premios que ya habían sido obtenidos.
Esto no es un problema aislado. Es un flujo constante de reclamaciones que pone en cuestión la forma en que se está tratando a los jugadores en el mercado del juego online regulado en España.
Cierres de cuentas en Winamax: lo que cuentan los clientes
Los testimonios que llegan al despacho siguen una línea común:
Cierre de cuenta sin previo aviso, muchas veces tras periodos de ganancias regulares.
Acusaciones de fraude o colusión sin aportar al jugador una explicación detallada ni pruebas concretas.
Bloqueo o retraso en el pago de premios que obliga al cliente a iniciar un procedimiento judicial para poder cobrar lo que ya había ganado.
Atención al cliente deficiente, con respuestas automáticas o genéricas que no resuelven el fondo del problema.
Lo que dice la Ley del Juego en España
La Ley 13/2011 de regulación del juego y su normativa de desarrollo son claras:
Todo jugador tiene derecho a cobrar sus premios en tiempo y forma.
El operador está obligado a motivar por escrito cualquier cierre o restricción en la cuenta del usuario.
El consumidor puede reclamar ante el operador, ante los tribunales civiles si considera vulnerados sus derechos.
Cuando estas garantías no se cumplen, se genera una situación de indefensión que solo puede corregirse con la vía judicial.
“Si pierdes, puedes seguir. Si ganas, todo se complica”
Muchos de los afectados transmiten la misma percepción:
El jugador que pierde nunca es cuestionado.
El jugador que gana es señalado con etiquetas como “fraude” o “colusión” que justifican el cierre de su cuenta o el bloqueo de sus fondos.
Esto crea un desequilibrio contractual evidente, donde el operador siempre mantiene la ventaja y el jugador asume el riesgo de quedarse sin explicación ni acceso a sus ganancias.
Vías legales frente a los bloqueos en Winamax
Ante estas situaciones, desde el despacho actuamos en tres frentes:
Requerimientos fehacientes a Winamax, solicitando motivación individualizada y el pago inmediato de premios pendientes.
Reclamaciones administrativas ante la DGOJ, denunciando la falta de transparencia y los incumplimientos detectados.
Demandas judiciales, que en muchos casos han dado la razón a los jugadores, obligando al operador a abonar las cantidades retenidas.
Cada vez más resoluciones judiciales confirman lo evidente: los cierres sin motivación suficiente ni pruebas no tienen soporte jurídico.
Conclusión: el verdadero “riesgo” lo asume el jugador
Las reclamaciones que llegan al despacho sobre Winamax no son anecdóticas. Representan un problema estructural: un modelo en el que las reglas parecen distintas para quien pierde y para quien gana.
Recordemos:
Todo jugador tiene derecho a una explicación clara y motivada.
Todo premio obtenido debe ser abonado sin dilación.
Y todo cierre de cuenta debe estar debidamente justificado.

